La administración sanitaria se centra en abordar y resolver problemas de salud oral en la comunidad, mientras que la salud pública se define como la ciencia y arte que previene enfermedades y promueve el bienestar a través de acciones organizadas de la comunidad. A lo largo de la historia, desde sociedades primitivas hasta la contemporaneidad, se han observado cambios en la percepción y tratamiento de la salud y las enfermedades, así como la evolución de las estrategias de salud pública. Actualmente, la salud pública enfrenta desafíos globales como la precariedad económica y la necesidad de promover estilos de vida saludables.