Este documento define la inteligencia emocional como la capacidad de sentir, entender, controlar y modificar estados emocionales propios y de los demás. Explica que la inteligencia emocional está compuesta de competencias intrapersonales como la autoconciencia, la auto regulación y la motivación, y competencias interpersonales como la empatía y las habilidades sociales. Finalmente, señala que la inteligencia emocional es un factor clave en las organizaciones modernas y presenta un reto de armonizar la racionalidad y las emociones.