El documento describe los derechos sexuales y reproductivos como derechos humanos fundamentales basados en principios como la igualdad, libertad y autonomía. Explica que existen acuerdos internacionales y leyes nacionales que garantizan estos derechos, como el derecho a decidir el número de hijos y su espaciamiento de manera libre e informada. También cubre el derecho a la salud reproductiva sin discriminación y a recibir atención médica en caso de violación u otras situaciones.