El documento explora la crisis de valores en Europa contemporánea, discutiendo cómo la muerte de Dios ha llevado a una falta de moralidad y alienación social. Se abordan las contribuciones de filósofos como Nietzsche y Marx, quienes cuestionan la verdad, la moral tradicional y proponen nuevas formas de entender la realidad y el poder. Finalmente, se critica la post-verdad y se enfatiza la necesidad de recuperar un sentido de responsabilidad y razonamiento público en un mundo que enfrenta inmediatez y relativismo moral.