El documento aborda el arte prerrománico en Europa, centrándose en tres obras clave: San Pedro de la Nave, Santa María del Naranco y San Miguel de Escalada, y su evolución desde el arte visigodo hasta el asturiano y mozárabe. Se detalla la influencia de las tradiciones germánicas y bizantinas, así como características arquitectónicas y ornamentales distintivas de cada periodo. Además, se destacan los contextos históricos en los que estas manifestaciones artísticas se desarrollaron, reflejando la transición entre los diferentes estilos y las influencias culturales en la península ibérica.