La innovación implica crear o mejorar productos y procesos para generar valor competitivo y afecta el desarrollo económico y social a nivel global. Además, las habilidades gerenciales y blandas son cruciales para que los líderes promuevan un entorno adaptable y eficiente, potenciando la innovación y el crecimiento organizacional. La gestión empresarial ha evolucionado hacia un enfoque integral que abarca adaptabilidad, innovación y sostenibilidad, aunque su implementación enfrenta desafíos prácticos en el contexto actual.